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“Todos queremos que los comités de viviendas de la zona logren concretar sus proyectos y tengan sus casas definitivamente, pero no comprando terrenos por medio de procesos extraños y con una enorme falta de transparencia en el uso de recursos públicos”, con estas palabras el Consejero Regional Marcos Tricallotis (Republicano), explicó la confusa situación que se vivió este lunes en el Core de Valparaíso, cuando prácticamente se les obligó a votar el traspaso de recursos para la adquisición de terrenos destinados para proyectos habitacionales.
El Consejero indicó que tuvieron que sufragar ciegas, sin conocer ¿cuáles son las dimensiones de los terrenos?, ¿cuántas hectáreas están comprometidas?, ¿qué calidad tienen los predios? y lo más importante: ¿quiénes son los dueños?, porque serán beneficiados nada más ni nada menos que con $13 mil millones, cifra a simple vista exagerada.
En la Comisión de Vivienda, presidida por el consejero Manuel Murillo (PPD), tampoco fueron capaces de responder esas interrogantes y más bien se presentaron informes técnicos ambiguos y sin las correspondientes tasaciones reales de los terrenos, lo cual generó aún más dudas.
“Deben ser la hectáreas más cara de Chile y si bien el propósito de fondo es dar solución habitacional a comités de vivienda que esperan por años su casa propia, la verdad que todo el proceso ha sido muy sospechoso. Nosotros como Cores tenemos la obligación de velar por el correcto uso de los recursos públicos, sobre todo considerando el escándalo por los traspasos millonarios a fundaciones. Aquí nos obligaron a entregar un cheque en blanco, pero no seremos responsables de eventuales irregularidades si es que se descubren en el futuro”, argumentó Tricallotis.
Por último el consejero regional acusó a otros colegas y al propio Gobernador Regional de utilizar a los comités de vivienda, quienes fueron llevaron en masa hasta el pleno del Core, para extorsionar y presionar a algunos consejeros para que votaran a favor de la iniciativa, sin conocer que el tema de fondo no son las soluciones habitacionales, sino que exigir una mayor transparencia en la adquisición del terreno donde serán instaladas sus casas.
“Si después se descubre que la compra se hizo de manera irregular, con montos abultados o sin los requisitos técnicos necesarios, incluso esas mismas familias podrían correr el riesgo de perder sus hogares. Eso hay que evitarlo y ojalá los comités lo pudieran entender también”, puntualizó el Core.
