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En el marco de la conmemoración de los 70 años de la Refinería Aconcagua y los 80 años del descubrimiento del petróleo en Magallanes, Enap alcanzó un nuevo hito en su política de relacionamiento comunitario al registrar la visita número 1.000 del programa Enap Puertas Abiertas en la refinería de Concón. La iniciativa reafirma la apertura de la empresa hacia su entorno y la disposición a transparentar su operación industrial y su rol estratégico en el suministro energético del país.
El programa —que incorpora visitas al Parque La Isla, que alberga el humedal de la desembocadura del río Aconcagua— ha fortalecido la relación con organizaciones territoriales, vecinales y académicas mediante recorridos guiados que muestran procesos productivos, estándares ambientales y medidas de seguridad. La visita número 1.000 fue protagonizada por la comunidad de los Tres Esfuerzos, ubicada frente a la refinería, cuyos integrantes recorrieron en bus y participaron en un espacio de diálogo abierto con representantes de la compañía.
Para el gerente de Enap Refinería Aconcagua, Jorge Alméstar, esta iniciativa “nos permite abrir la operación, explicar cómo trabajamos, transparentar nuestros procesos y derribar mitos respecto de lo que significa operar una refinería. También ha sido clave para acercar a estudiantes universitarios, quienes conectan teoría y práctica en terreno”. Además, “este año hubo una alta participación femenina, algo que nos enorgullece porque rompe la idea de que esta industria es un espacio exclusivo para hombres. Esperamos que esta experiencia inspire vocaciones y atraiga talento que pueda integrarse a futuro a nuestras operaciones”, enfatizó.
La jornada refuerza una política basada en la transparencia y el relacionamiento permanente con el entorno. En esa línea, el director (i) de Gestión Territorial de Enap Refinería Aconcagua, Josué Vega, subrayó que “estas mil visitas representan mucho más que un número: muestran cómo hemos abierto nuestras puertas con transparencia y cercanía”, dijo.
Impresiones de vecinas y vecinos
La experiencia dejó impresiones positivas entre quienes participaron del recorrido. La presidenta de la Junta de Vecinos Los Tres Esfuerzos, Lorena Sepúlveda, comentó que le parece muy bien que exista el Programa Enap Puertas Abiertas porque “nos permite entender qué ocurre aquí y cuál es el impacto en la comunidad. La refinería se ve ordenada, segura. Vinimos 20 personas; cerca de la mitad no conocía la operación y el resto quedó encantada con lo visto”, sostuvo.
En tanto, la tesorera de la misma organización, Miriam Espinoza, aclaró que “nunca había venido y siempre veía las antorchas desde lejos. Lo que una imagina no es lo mismo que ver esto en vivo. Nos sorprendió la cantidad de productos que se generan aquí”.
A las impresiones de la jornada se sumó la mirada de Dariela Araneda, participante del recorrido, quien expresó: “yo veía la refinería solo desde afuera y no imaginaba la cantidad de procesos que tiene. Es enorme, como una ciudad. Aprendí mucho y encontré muy linda la visita. También conocí el humedal por primera vez; es precioso, lleno de aves y muy limpio. Me voy contenta de haber estado aquí y de conocer todo lo que se hace dentro de la refinería y en el entorno natural”.
Con más de siete décadas de operación, Enap Refinería Aconcagua reafirma su vínculo con el territorio y proyecta nuevos espacios de encuentro y conocimiento sobre el rol energético que la empresa cumple a nivel nacional. La visita número 1.000 se consolida como un símbolo de apertura, diálogo y futuro compartido.
