Esthefania Astargo y Gabriel Guerra, estudiantes del Magíster en Ingeniería Biomédica de la Universidad de Valparaíso, se adjudicaron el Concurso de Valorización de la Investigación en la Universidad (VIU) 2025 de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID) para desarrollar VIZCACHA, una plataforma que integra inteligencia artificial conversacional y visualización de datos para contribuir al trabajo de radiólogos en oncología.
La iniciativa, a la que están asociados los profesores de la Facultad de Ingeniería UV e investigadores del Instituto Milenio en Ingeniería e Inteligencia Artificial para la Salud Rodrigo Salas y David Ortiz, busca enfrentar una crisis crítica en el sistema de salud: Chile registra más de 28 mil muertes anuales por cáncer y listas de espera que alcanzarían 2,5 millones a nivel nacional en 2024.
La tecnología que humaniza el trabajo radiológico
A través del uso de algoritmos de inteligencia artificial, VIZCACHA permite a los radiólogos interactuar intuitivamente –a través de un modelo de lenguaje natural– con bases de datos clínicas, recuperando información de pacientes, reportes clínicos e imágenes médicas mediante la simple interacción con un chat.
La plataforma integra herramientas de visualización y funciones de deep learning para segmentación automatizada de tumores, todo diseñado para reducir la carga operativa que actualmente incluye hasta 1.750 clics innecesarios diarios y retrasos en el 53% de los informes urgentes.
«Para mí, lo más relevante es acercar la inteligencia artificial al trabajo diario de los radiólogos como una herramienta de apoyo que les permita potenciar su trabajo», explica Esthefania Astargo. «Su mayor aporte será optimizar el uso del tiempo y la información, traduciéndose en diagnósticos más oportunos y un beneficio concreto para los pacientes» agrega.
Gabriel Guerra destaca el potencial transformador de la tecnología: «Los modelos de lenguaje han masificado la IA porque facilitaron su uso. Incorporar esto a la práctica clínica tendrá un impacto importante en la rapidez con que se brinda el servicio y en el bienestar del paciente».
Un reconocimiento al esfuerzo colaborativo
Ambos estudiantes reconocen la sorpresa y orgullo que significó obtener este fondo altamente competitivo. «Representa un reconocimiento al esfuerzo de todo el equipo y marca un punto de inflexión: ahora podemos transformar una idea del laboratorio en una herramienta clínica real», afirma Astargo.
El proyecto, que ya cuenta con un prototipo inicial desarrollado en el «Concurso de Prototipado» de Ingeniería 2030 de la UV, se ejecutará durante 12 meses con posibilidad de extensión. VIZCACHA aspira a convertirse en un puente tecnológico que reduzca el burnout de profesionales de la salud y mejore el acceso a diagnósticos oportunos en regiones.