Nebu Mora es de Brasil y pertenece al pueblo mapuche. Vive hace 13 años en Chile y hace unos días tuvo el parto de su primera hija Inae, en el Hospital Dr. Gustavo Fricke. Su experiencia fue diferente a la de otras madres y a la de cualquiera hasta ahora en el establecimiento de salud, ya que solicitó un parto con enfoque intercultural, siendo la primera gestante en acceder a este modelo que incorpora los pueblos originarios a la salud tradicional.
La persona gestante, quien llegó a la institución ya en trabajo de parto, dialogó con el equipo médico, el que activó de inmediato el Programa Especial de Salud y Pueblos Indígenas (PESPI) recurriendo a la facilitadora intercultural, una figura nueva encargada de informar y orientar a los usuarios que se consideren parte de los pueblos originarios. Así, manifestó sus intenciones de implementar un altar, usar música ancestral durante el trabajo de parto, acceder a acompañamiento espiritual e ingresar una doula, quien presta orientación y apoyo físico y emocional durante el embarazo, el parto y el posparto.
Nebu manifestó su satisfacción y asombro al darse cuenta de que se puede requerir una atención con enfoque intercultural. “Durante el proceso de intento de trabajo de parto inducido, pude armar mi altar, estar vocalizando, cantando con tambor, con mi doula, y a los médicos también les parecía súper bonito, y decían como: – guau, qué bonito, porque también nos enseña que hay otras formas de nacer, de intensionar ese nacimiento. Es bonito poder tener eso en un espacio que está institucionalizado, y que no suele haber mucha perspectiva de apertura a eso, entonces me alegro de haber tenido la oportunidad de que se haya podido permitir un poco la fusión de esos mundos”.
Jonathan Gálvez, matrón supervisor del Área de Parto Integral, señaló que este parto fue una experiencia desafiante que esperan se replique con otras usuarias, y estar para entonces más preparados, de modo de mejorar su experiencia como pueblos originarios. “Nosotros estamos muy contentos de que nos hayan escogido como su centro de salud, donde se pueden venir a atender y finalizar sus embarazos. Resultó todo muy bien, así que esperamos que este sea el principio de varios partos más, no solo del pueblo Mapuche, sino de otros pueblos. Tenemos que hacer ajustes, tenemos que armar protocolos, hay harto por hacer y trabajar con la Comisión de Interculturalidad y esperamos seguir siendo un aporte a la sociedad y a la población que se atiende en el Servicio de Salud Viña del Mar Quillota Petorca”.
Por su parte Abigail Alarcón, la facilitadora intercultural del Hospital Gustavo Fricke, indicó que “fue una instancia en la cual se generaron diferentes coordinaciones con las unidades clínicas y también hicimos una sensibilización de aquellos derechos y procesos de acompañamiento espiritual que estamos brindando, como cuál es la finalidad de este acompañamiento espiritual y cómo el Hospital Gustavo Fricke se está aperturando para hacer valer el derecho a la salud con enfoque intercultural, a personas que se sienten pertenecientes a un pueblo originario”.
Para finalizar, la subdirectora de Gestión del Usuario, Sandra Aroca, agregó que “el Programa Especial de Salud y Pueblos Indígenas (PESPI) considera, además de un parto con enfoque intercultural, el apoyo de la facilitadora en diferentes aspectos como: apoyar el fortalecimiento de la medicina de los pueblos originarios, conectar a las organizaciones indígenas con el sistema de salud, derivar usuarios a los centros de salud indígenas existentes en la zona, realizar acompañamiento espiritual con pertinencia cultural y capacitar al personal de salud sobre la cosmovisión de los pueblos originarios. Es importante que como establecimiento le demos la seguridad a nuestros pacientes y la garantía, de que estamos trabajando en incorporar nuestros pueblos originarios a la salud pública”.